jueves, 30 de enero de 2014

los libros que devoramos


Hay libros que leemos y hay libros que devoramos, la playa es propicia para la lectura, la playa con lluvia , más aún.
me encuentro en esas instancias devorando Leviathan de Paul Auster, dejo aquí un mínimo párrafo que intenta explicar el por qué de la voracidad.

..." Cuanto más le conocía, más me impresionaba su productividad. Yo siempre he sido lento, una persona que se angustia y lucha con cada frase, e incluso en mis mejores días no hago más que avanzar centímetro a centímetro, arrastrándome sobre el vientre como un hombre perdido en el desierto. La palabra más corta está rodeada de kilómetros de silencio para mí y hasta cuando consigo poner esa palabra en la página, me parece que está allí como un espejismo, una partícula de duda que brilla en la arena. Estoy separado de mis propios pensamientos por un muro, atrapado en una tierra de nadie entre el sentimiento y su articulación, y por mucho que trate de expresarme, raras veces logro más que un confuso tartamudeo.."

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